ODS 11: Lograr que las ciudades y los asentamientos humanos sean inclusivos, seguros, resilientes y sostenibles

Foto: ONU Mujeres/Fatma Elzahraa Yassin

Metas

  • Para 2030, proporcionar acceso a sistemas de transporte seguros, asequibles, accesibles y sostenibles para todos y mejorar la seguridad vial, en particular mediante la ampliación del transporte público, prestando especial atención a las necesidades de las personas en situación vulnerable, las mujeres, los niños, las personas con discapacidad y las personas de edad.
  • Para 2030, proporcionar acceso universal a zonas verdes y espacios públicos seguros, inclusivos y accesibles, en particular para las mujeres y los niños, las personas de edad y las personas con discapacidad.
  • Para 2030, asegurar el acceso de todas las personas a viviendas y servicios básicos adecuados, seguros y asequibles y mejorar los barrios marginales.
  • Para 2030, aumentar la urbanización inclusiva y sostenible y la capacidad para una planificación y gestión participativas, integradas y sostenibles de los asentamientos humanos en todos los países.
  • Redoblar los esfuerzos para proteger y salvaguardar el patrimonio cultural y natural del mundo.
  • Para 2030, reducir de forma significativa el número de muertes y de personas afectadas por los desastres, incluidos los relacionados con el agua, y reducir sustancialmente las pérdidas económicas directas vinculadas al producto interno bruto mundial causadas por los desastres, haciendo especial hincapié en la protección de los pobres y las personas en situaciones vulnerables.
  • Para 2030, reducir el impacto ambiental negativo per capita de las ciudades, incluso prestando especial atención a la calidad del aire y la gestión de los desechos municipales y de otro tipo.
  • Apoyar los vínculos económicos, sociales y ambientales positivos entre las zonas urbanas, periurbanas y rurales mediante el fortalecimiento de la planificación del desarrollo nacional y regional.
  • Para 2020, aumentar sustancialmente el número de ciudades y asentamientos humanos que adoptan y ponen en marcha políticas y planes integrados para promover la inclusión, el uso eficiente de los recursos, la mitigación del cambio climático y la adaptación a él y la resiliencia ante los desastres, y desarrollar y poner en práctica, en consonancia con el Marco de Sendai para la Reducción del Riesgo de Desastres 2015-2030, la gestión integral de los riesgos de desastre a todos los niveles.
  • Proporcionar apoyo a los países menos adelantados, incluso mediante la asistencia financiera y técnica, para que puedan construir edificios sostenibles y resilientes utilizando materiales locales.
ODS 11: Ciudades y comunidades sostenibles

Actualmente, el mundo se está urbanizando a niveles nunca vistos en la historia. Para muchas mujeres y hombres, la oportunidad de trasladarse a una ciudad representa poder aspirar a una vida mejor: mayores ingresos, un puesto de trabajo más interesante, una residencia más acogedora y acceso directo a los servicios modernos.

Sin embargo, las ciudades también son lugares de profunda desigualdad y desesperanza. La población de nuevos migrantes, muchos de ellos mujeres, puede acabar en suburbios sobrepoblados, mal conectados con el transporte público o servicios esenciales como el agua limpia. La vida pasa a ser entonces peligrosa e insalubre, con numerosos obstáculos para asegurarse un puesto en la economía urbana.

Para las mujeres, la discriminación de género acentúa los riesgos y se añade a ellos. No poder ir en autobús a una clínica para dar a luz puede derivar en una discapacidad permanente o la muerte. En general, los desastres naturales se cobran las vidas de más mujeres que hombres y matan a mujeres más jóvenes que los hombres [1]. Si una mujer sobrevive a un desastre como una inundación o un terremoto, probablemente tendrá pocas opciones de recuperarse.

Las ciudades y los asentamientos humanos pueden ser sitios seguros, prósperos, equitativos y agradables donde vivir. Pero esto no puede darse sin incluir a todas las ciudadanas y todos los ciudadanos en su crecimiento. Todos los elementos de la gobernanza, la planificación y las finanzas urbanas deben incorporar activamente medidas a favor de la igualdad de género. Además, las mujeres merecen desempeñar papeles en pie de igualdad a la hora de tomar decisiones sobre un mundo cada día más urbano.

Los esfuerzos de ONU Mujeres garantizan que los espacios públicos urbanos sean seguros y que las mujeres y las niñas puedan disfrutar de ellos sin ser agredidas o acosadas. La iniciativa mundial Ciudades Seguras de ONU Mujeres ha generado múltiples resultados innovadores a través de las alianzas establecidas con alcaldías, gobiernos nacionales, grupos de mujeres y otras socias y socios comunitarios. A fin de disminuir el número de mujeres afectadas por los desastres, la entidad también promueve la planificación y la capacitación relacionadas con la reducción del riesgo de desastres para ayudar a las mujeres a ser más resilientes y mitigar los efectos del cambio climático.

Historias

Vidas salvadas en Viet Nam gracias a la participación de las mujeres en la planificación para casos de desastres
Mediante la capacitación de mujeres en la gestión de desastres y la acción de grupos de presión en el país, se ha reconocido la contribución de las mujeres. Un decreto del gobierno ahora otorga a la Unión de Mujeres un espacio oficial en los organismos de toma de decisiones.


Quito: una ciudad comprometida con la prevención del acoso sexual en los espacios públicos
Como una de las cinco primeras ciudades en formar parte de la iniciativa mundial Ciudades Seguras de ONU Mujeres, Quito está tomando medidas para prevenir y erradicar todas las formas de violencia contra las mujeres y las niñas. Siguiendo recomendaciones de un estudio de diagnóstico, el Consejo Municipal de Quito adoptó leyes pioneras para prevenir la violencia contra las mujeres, e incluyó el acoso sexual en espacios públicos en su ordenanza municipal.



Notas

[1] Naciones Unidas Consejo Economico y Social (2013), Gender equality and the empowerment of women in natural disasters Report of the Secretary-General, p. 2.