Mujeres en espacios de poder: María Leonice Tupari, conectando a las mujeres indígenas y defendiendo sus derechos en Brasil
Fecha:
Uno de los principales impactos que ha tenido la pandemia en las comunidades indígenas de Brasil es en su cultura, dice Maria Leonice Tupari, de 45 años, coordinadora de la ONG Asociación de Guerreros Indígenas de Rondônia (AGIR) en la ciudad de Cacoal, Brasil. Fundada en 2015, AGIR representa los derechos de 56 pueblos indígenas del estado de Rondônia, promueve el empoderamiento de las mujeres y denuncia las violaciones contra los derechos humanos.
"Tenemos la costumbre de visitarnos, por lo que tuvimos que aprender a vivir de una manera diferente", dice Tupari. "Mucha gente no entendía al principio qué era el coronavirus, o por qué tenían que cambiar la forma de interactuar entre comunidades, y no podían tener celebraciones o funerales tradicionales".
Tupari trabaja en el sector de las ONG desde el año 2000 y ha visto un aumento constante de la violencia contra las mujeres indígenas en los territorios.
A través del proyecto financiado por la Unión Europea "Conectando Mujeres, Defendiendo Derechos", ONU Mujeres realizó una serie de consultas con socios y defensoras de derechos humanos entre marzo y abril de 2020. Las consultas abrieron el camino para la concesión de pequeñas subvenciones destinadas a reforzar las capacidades institucionales de las defensoras de derechos humanos en la defensa de los derechos y la prevención de la violencia contra las mujeres durante la pandemia. AGIR fue una de las siete organizaciones que recibieron la subvención; la convocatoria de solicitudes de financiación recibió 629 propuestas.
Tupari afirma que el proyecto ha contribuido a reforzar la capacidad de comunicación de las mujeres líderes indígenas de todo el estado, su uso de las herramientas de comunicación digital y su comprensión del impacto de la pandemia para permitirles adaptarse mejor y contrarrestar la desinformación sobre el virus y la vacuna.
“Antes del proyecto, solíamos reunirnos más a menudo, incluso con el equipo de ONU Mujeres. Hoy todo es más tecnológico, en línea. Esta es una de las cosas que más ha cambiado mucho. A pesar de no ser expertas en tecnología, hemos tenido que aprender y seguimos adquiriendo uevas herramientas para comunicarnos. Con el proyecto aprenderemos aún más y superaremos estos retos”.
“Las cosas cambian constantemente, así que tenemos que adaptarnos. Al mismo tiempo, creo que hay un lado positivo: antes del COVID-19, cuando teníamos reuniones había un límite de personas que podían asistir. ¡Con las reuniones en línea ya no hay límite! A pesar de las dificultades de acceso a Internet, estamos consiguiendo actuar más y reunir a más personas. Antes, ni siquiera sabíamos que había otras formas de reunirse, estamos conociendo la realidad de otras personas,” asegura Tupari.
Parte de la serie Mujeres en espacios de poder: protagonistas del cambio transformador en favor de los derechos humanos y la igualdad de género.