Mensaje: Solidaridad intergeneracional - Creando un mundo para todas las edades

El edadismo es un problema de desigualdad, discriminación e injusticia. Si no lo abordamos, no lograremos la igualdad de género para 2030. El edadismo afecta a todas las personas, jóvenes y adultas. Los prejuicios en torno a la edad están generalizados y crean una barrera enorme para la plena participación de las mujeres jóvenes en sus comunidades. Los estereotipos negativos pueden exacerbar normas y estigmas perjudiciales que impiden la plena participación de las jóvenes en sus comunidades en todo el mundo. Es esencial que cambiemos estas narrativas destructivas y fomentemos y facilitemos el liderazgo y la plena participación de las mujeres jóvenes en la toma de decisiones, para que la configuración del futuro considere sus opiniones y conocimientos. 

Es necesario un cambio radical en nuestras respuestas colectivas a la juventud y a los acuerdos que la excluyen o la apoyan. Necesitamos un enfoque que sea interseccional, con enfoque de género, y que reconozca y admita los impactos a largo plazo de la discriminación por edad, para garantizar que nadie se quede atrás. 

Lograr la solidaridad intergeneracional requiere que reflexionemos en profundidad sobre nuestros compromisos con la dignidad y la libertad colectiva, en solidaridad con los movimientos feministas. Necesitamos cambios prácticos que cambien las pautas de exclusión por nuevas pautas de compromiso. Estos podrían incluir medidas especiales y cuotas de representación, la integración de una perspectiva de género en todas las políticas y programas relacionados con la juventud y el envejecimiento, y el fortalecimiento de la base de conocimientos sobre los impactos de la discriminación que surgen de las intersecciones entre el género y la edad. Para abrirnos paso hacia un futuro más positivo, tenemos que actuar enérgicamente, de la mano de jóvenes con liderazgo, y comprometernos con soluciones sostenibles. 

Hacemos un llamado a todas las contrapartes para que actúen solidariamente y adopten prácticas de liderazgo transformacional que combatan el edadismo y lideren el cambio junto a los jóvenes en cada paso del camino.  Debemos aprovechar las evidencias que destacan las mejores prácticas en estos esfuerzos. Debemos fortalecer el cuerpo de investigación existente para captar plenamente la amplitud del edadismo. Y debemos avanzar en solidaridad intergeneracional y unidad con el movimiento feminista, para cumplir la promesa de la Agenda 2030 para todas las personas. 

 
Visite el sitio web de la ONU para obtener más información sobre el Día Internacional de la Juventud.