Rosa Huenchuleo: “Defender la tierra no tiene otro fin que proteger la vida”
Rosa Huenchuleo Cifuentes pertenece al pueblo originario mapuche en Chile. Desde hace 15 años vive en Tarapacá. Es administradora pública, presidenta de la cooperativa de mujeres trabajadoras Añañuca y lidera la asociación gremial de emprendedoras locales Küyen Ray. Rosa es participante del programa Originarias de ONU Mujeres y a través de su emprendimiento Orígenes Reutiliza busca no sólo fortalecer su autonomía económica, sino también promover acciones de reciclaje que contribuyan a la reducción de contaminación y basura.
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¿En qué consiste tu emprendimiento Orígenes Reutiliza?
Somos un negocio que emerge con la necesidad de transmitir un mensaje cultural, con una visión y un potente valor histórico de nuestras raíces. Nuestros productos son hechos en Chile con materiales 100% reciclados por un equipo de seis personas, todas comprometidas con el medio ambiente y con el propósito de generar un impacto positivo en el entorno.
Orígenes Reutiliza se encarga de recolectar, limpiar y pulir botellas de vino y cervezas para darles una segunda vida. Creamos maceteros ecológicos, campanas de viento, posa vasos, lámparas, entre otros productos, con una maquinaria creada por nosotras mismas. También somos proveedoras de otras pymes, las que nos envían su materia prima y nosotras nos encargamos de hacer nuevos productos.
¿Cuál es el vínculo entre las mujeres indígenas y la tierra?
Yo soy indígena y para mi es súper importante que se respeten la tierra, los recursos naturales y el medio ambiente. Como pueblos originarios tenemos una relación directa con la tierra y su cuidado. Somos las mujeres indígenas quienes vivimos mayoritariamente en zonas rurales y quienes nos preocupamos de cuidar nuestro entorno. Esto siempre ha sido así porque forma parte de nuestras tradiciones.
Desde este emprendimiento estamos conectadas no solo con la tierra y la importancia de cuidarla a través del reciclaje, y darle una nueva vida o uso a lo que llamamos basura, sino también en la generación de productos con identidad y el enfoque cultural de nuestros pueblos.
Además, estar en Originarias creó un vínculo super importante para mí. Pertenecer al programa me hizo conectar con otras mujeres indígenas, especialmente con las mujeres aymaras, y también fortalecer ese sentido de pertenencia como mujer mapuche. Me esmero para que la identidad propia del pueblo mapuche se vea reflejada en mis productos.
¿Por qué es importante darles una nueva vida a estos productos?
Actualmente vivimos en la cultura del desecho. Usamos algo una vez y lo botamos o siempre estamos anhelando el sustituto nuevo. Este comportamiento en algún momento va a saturar al planeta. Para nosotras es importante poder demostrar que hay elementos que se pueden reutilizar y darle una segunda vida, un segundo uso.
Cuando vamos a buscar las botellas en juntas de vecinos, en casas o microbasurales, lo que más encontramos es vidrio y plástico. Por eso hacemos talleres de reciclaje donde le enseñamos a las personas que tienen la intención, pero que no saben cómo hacerlo.
También reciclamos libros. Todos los años hacemos una campaña para que los vecinos y las vecinas los donen. Esta pequeña acción de reciclaje transmite además cultura, evoca momentos felices e incluso nos lleva a nuestra infancia, cuando releemos esos clásicos de la literatura que todos vimos en el colegio.
¿Por qué es importante promover la participación de las mujeres que lideran iniciativas medioambientales?
En el programa Originarias hemos hecho diferentes capacitaciones y escuelas. Una de ellas es la de liderazgo. Ahí descubrí que había una falta de información, por eso la importancia de aprender, pero sobre todo de transmitir y compartir nuestros saberes y tradiciones a quienes no pertenecen a los pueblos originarios.
Desde los espacios de liderazgo donde participó, como, por ejemplo, la asociación gremial y la cooperativa de mujeres, inculcamos los principios de la economía circular, el trabajo colaborativo y la identidad. Esta última es super importante porque nos permite comunicar quienes somos y de dónde venimos, entonces, yo, como mujer indígena, he intentado integrar el amor y el respeto por la tierra en mi trabajo y emprendimiento.
¿Cómo pueden contribuir a mitigar la crisis climática la cooperación y el trabajo colaborativo?
Las mujeres somos agentes de cambio. Estas redes de mujeres pueden ayudar a mitigar la crisis climática porque el trabajo colaborativo tiene mucha más fuerza. Creo que debemos innovar en la formulación de respuestas; por eso nosotras promovemos la economía circular, porque con nuestros productos podemos demostrar que podemos ser aporte educativo, cultural y económico, al ser una empresa verde, comprometida con el medio ambiente.
Tenemos normativas, como, por ejemplo, no usamos bolsas de plástico, nuestras tarjetas son biodegradables, incentivamos que nuestros clientes lleven bolsas de género, incluso nuestras tarjetas de presentación son biodegradables y, al ser hechas con semillas, pueden sembrarse.
¿Cuáles son los futuros proyectos de Orígenes Reutiliza?
Estamos trabajando en un nuevo prototipo de maquinaria para crear escobas ecológicas, las cuales estarían hechas de botellas de plástico. Con esta iniciativa buscamos sacar de circulación 15 botellas de tres litros y crear un nuevo producto con una durabilidad de 2 a 4 años más. Por ahora es todo muy rudimentario y estamos en búsqueda de financiamiento para poder avanzar en un diseño más elaborado de esta maquinaria.
A futuro, en cuanto a sustentabilidad, como mujer, veo la premura por tomar medidas a la crisis climática. El cambio tiene que ser ahora. Siento una responsabilidad mucho mayor por ser indígena. Tenemos un respeto y un apego por la tierra desde nuestra crianza que nos la trasmitieron nuestras madres y padres. Por eso creo que todas las iniciativas funcionan -no importan si son grandes o pequeñas, todas suman. A veces esperamos que otras personas u otras entidades faciliten una solución, pero creo que la solución va en el individuo también.
¿Qué iniciativas se deberían impulsar para apoyar y visibilizar el trabajo de las mujeres que lideran emprendimientos o proyectos con impacto medioambiental?
Me encantaría que existieran más espacios de participación y de encuentro a nivel de Latinoamérica donde pudiéramos conversar con hermanas de otros pueblos originarios e intercambiar experiencias. Esto es muy enriquecedor porque podemos aprender y replicar otros modelos de éxito y compartir los modelos o iniciativas que tenemos nosotras acá que quizá sirvan para aplicar a otros territorios.
Sin duda toda la experiencia y lo aprendido durante todos estos años recolectando y reciclando le pueden servir a otra persona en otra ciudad u otro territorio. Este diálogo puede ser una bonita retroalimentación porque a veces las realidades, a pesar de las distancias, son muy parecidas.
¿Qué mensaje te gustaría compartir con otras mujeres de América Latina y el Caribe?
Lo que yo quisiera transmitirles a las hermanas de otros países es que con pequeños cambios uno puede generar un impacto muy grande. Nosotras estamos llamadas a aportar y promover un cambio. Las mujeres somos muy creativas y tenemos la capacidad de reinventarnos y de innovar. Defender la tierra no tiene otro fin que proteger la vida.
Nota: Estas publicaciones buscan estimular un debate propositivo en torno a los principales temas de interés para el avance de la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres en América Latina y el Caribe. Los conceptos expresados por las personas entrevistadas para la producción de nuestros contenidos editoriales no reflejan necesariamente la posición oficial de ONU Mujeres y agencias del Sistema de Naciones Unidas.