Artesanas paraguayas hacen frente a la crisis con solidaridad y autogestión
Fecha:
La crisis económica causada por la pandemia de COVID-19 ha afectado a millones de mujeres en el mundo, sobre todo a aquellas dedicadas al trabajo independiente.
Hace más de tres meses, desde el inicio de la cuarentena, mujeres artesanas de la ciudad de Itá, ubicada a 37 km de la capital paraguaya, han quedado sin ingresos fijos.
Las medidas de aislamiento impuestas por el gobierno para evitar la propagación del virus, ha impedido que puedan comercializar sus artesanías. La situación ha causado una gran preocupación en las mujeres, ya que gran parte de ellas tienen a su cargo el cuidado de niños y adultos mayores. Para hacer frente a la crisis, decidieron organizarse.
Mirian Cáceres, presidenta de la Asociación de Artesanas de Cestería y Cerámica, organización que actualmente cuenta con treinta y seis mujeres de la zona, comenta que una de las principales acciones que decidieron emprender para paliar el hambre, fue la organización de ollas populares.
Entre todas colaboran con los ingredientes y cocinan para las familias más necesitadas. "La única manera de sobrevivir a esta pandemia es mediante la solidaridad y la autogestión, hay compañeras que tienen niños que alimentar y dependen solo de lo que venden en el día" afirmó.
Mirian es ceramista, tiene 50 años, es madre de cuatro hijos y abuela de tres niños. La asociación que preside forma parte del proyecto "Promoviendo el emprendedurismo de las mujeres en el Mercosur" llevado adelante por ONU Mujeres y el Ministerio de la Mujer de Paraguay.
El proyecto ha movilizado a más de cuatrocientas emprendendoras del país, quienes han podido formarse en diferentes áreas con el fin de empoderarse económicamente. A lo largo de dos años, han aprendido sobre comercialización, administración, uso de medios tecnológicos y derechos básicos. Además, las mujeres han recibido insumos y herramientas para ampliar sus negocios y seguir trabajando.
"El proyecto ha sido importantísimo para nuestra comunidad, nos ha impulsado a mejorar no solo en lo profesional sino también en lo personal, hemos tejido redes solidarias entre nosotras y descubrimos que cuando las mujeres se unen no hay crisis que pueda con nosotras" sostuvo.