Guatemala prioriza el enfoque de género en la acción humanitaria

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Gestión del conocimiento, buenas prácticas y lecciones aprendidas en el quehacer humanitario desde una perspectiva de igualdad de género, derechos humanos y empoderamiento de las mujeres sitúan a Guatemala como el primer país de la región en crear un mecanismo al más alto nivel para promover la adopción de normas y políticas transformadoras con un enfoque de empoderamiento de todas las mujeres y las niñas y su participación igualitaria en la acción humanitaria. 

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Distribución kits de protección, emergencia erupción Volcan de Pacaya, 2018. Créditos: ONU Mujeres

Los desastres afectan a las mujeres, las niñas, los niños y los hombres de forma diferente. Las desigualdades de género aumentan la vulnerabilidad de las mujeres y limitan su acceso a la información y a los recursos necesarios para reducir los riesgos que se derivan de los desastres. 

La participación y el liderazgo de las organizaciones de mujeres mejoran la políticas y programas relativos a la reducción del riesgo de desastres. Hasta el momento, la mayoría de los países de América Latina y el Caribe no cuentan con marcos jurídicos y políticos que incorporen de manera integral la igualdad de género o que garanticen la participación de las mujeres en la toma de decisiones en lo que respecta a la reducción del riesgo de desastres. 

En Guatemala, durante las últimas emergencias, como la erupción del Volcán de Fuego, los huracanes Eta e Iota y la pandemia por el COVID-19, el Grupo de Trabajo de Género del Equipo Humanitario de País (GTGEHP), creado en 2016, liderado por ONU Mujeres y por la Secretaría Ejecutiva de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (SECONRED) y CARE, abrió espacios para que las mujeres participen en la toma de decisiones, que sus capacidades sean valoradas y que las acciones de respuesta y recuperación respondan a sus necesidades diferenciadas. 

El GTGEHP es responsable de impulsar y monitorear que la planificación, la implementación y las acciones de los clústeres y espacios sectoriales incluyan la perspectiva de igualdad de género y derechos de las mujeres y que las decisiones que toma la Asamblea General estén informadas y respondan a la situación de las mujeres, niñas y adolescentes, así como sus necesitades diferenciadas y sus potencialidades para generar respuestas basadas en la comunidad. 

Este espacio transformador forma parte de la arquitectura del Equipo Humanitario de País, como un ente asesor al más alto nivel y actúa como un grupo operativo y un espacio innovador que apoya técnica y estratégicamente al Equipo Humanitario de País para la transversalización de la igualdad de género. 

El Código de Conducta es un punto clave 

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Distribución de asistencia humanitaria en Alta Verapaz, emergencia Huracanes Eta e Iota, Alta Verapaz, Guatemala, 2020 Créditos: ONU Mujeres 

El GTGEHP ha tenido un papel fundamental en los procesos tanto de acción humanitaria como de reducción de riesgo de desastres. Uno de sus principales logros es el Código de Conducta, generado a solicitud de la Asamblea General y que rige las organizaciones y actores humanitarios adheridos a la Carta de Entendimiento de país.  

“El código incorpora aspectos relativos a los derechos humanos de las mujeres, cero tolerancias al acoso y abuso sexual y rendición de cuentas, entre otros aspectos. Se basa en los principios humanitarios y de protección internacional”, indica Libertad Benito, asesora de género del Centro de Estudios y de Cooperación Internacional (CECI) en Guatemala durante el período 2018-2019. 

“Es importante implementar y verificar el cumplimiento de los códigos de conducta en la acción humanitaria, como un elemento para reducir los riesgos de personas y brindar una respuesta digna”, enfatizó Linda Filitz, quien representó a la Secretaría Ejecutiva de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (SECONRED) en el GTGEHP durante el período 2019-2020, durante el taller de elaboración de criterios generales de códigos de conducta y su aplicación en la asistencia humanitaria. 

Alcances importantes 

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Certificación de mujeres agentes de protección en Huehuetenango, Projecto CERF 2020-2021. Créditos: ONU Mujeres

En Guatemala, el grupo ha desarrollado procesos de fortalecimiento de capacidades y herramientas innovadoras que guían la incorporación de la perspectiva de género en sectores de la acción humanitaria como agua, saneamiento e higiene, salud, albergues y protección, entre otros. A través de este esfuerzo conjunto han logrado promover los derechos humanos de las mujeres, así como implementar acciones para el fortalecimiento del rol de las mujeres en situación de emergencias o desastres, impulsando su liderazgo y participación en los procesos de toma de decisión. 

Las brechas de género en los ámbitos económico, social, ambiental, institucional y político tienen un impacto en la prevención del riesgo de desastres y en la toma de decisión para gestionar estos riesgos. En las crisis, estas brechas pueden profundizarse.   

Para poner en relieve las necesidades de las mujeres en las crisis, el GTGEHP desarrolló análisis rápidos de género (RGA por sus siglas en inglés) que reflejan la situación de vulnerabilidad y riesgo a la que se enfrentan las mujeres y cómo las desigualdades ya existentes aumentaron con las crisis sanitarias y socioambientales.   

Tanto el Panorama de Necesidades Humanitarias como el Plan de Respuesta Humanitario, incorporaron los resultados y recomendaciones brindadas por los RGA. “Esto ha permitido que las mujeres aumenten sus oportunidades de acceso a espacios de toma de decisión en la acción humanitaria y que la transversalidad de género en los planes de respuesta y recuperación sea una realidad”, indica Ana Grace Cabrera de ONU Mujeres.  

“El grupo ha gestionado respuestas inmediatas a las crisis generadas por la pandemia, tanto para contribuir a la aplicación del principio de la debida diligencia en la investigación de violaciones a los derechos humanos de las mujeres, particularmente durante el confinamiento, así como para reducir los riesgos de inseguridad alimentaria y de salud de mujeres del área rural y de trabajadoras del hogar que perdieron sus ingresos económicos”, resalta Angélica Valenzuela del Centro de Investigación, Capacitación y Apoyo a la Mujer (CICAM), haciendo referencia al mecanismo de monitoreo de la situación de derechos humanos de las mujeres durante la crisis del COVID-19. 

El Equipo Humanitario de Guatemala, con la asesoría y el acompañamiento técnico del Grupo de Trabajo de Género, ha destacado en la región por sus contribuciones al desarrollo e implementación de estrategias políticas y operativas para asegurar que los principios de no hacer daño y no dejar a nadie atrás en la gestión humanitaria sean una realidad para las mujeres y que sus voces y liderazgos inspiren las acciones coordinadas para la respuesta a las crisis y la prevención y manejo de riesgos de desastres. 

 

Acerca del Grupo de Trabajo de Género 

El Grupo de Trabajo de Género del Equipo Humanitario de País (GTGEHP) está liderado por ONU Mujeres, con la Secretaría Ejecutiva de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (SECONRED) y CARE como colíderes, y cuenta con la participación de OCHA, el Programa Mundial de Alimentos, UNFPA y el Centro de Estudios y de Cooperación Internacional (CECI).